¿A quién no le relaja la vista de un campo en primavera, el color en los jardines, el olor de flores…? La primavera nos llena de vida con su revolución natural, una vida plena de color, olor y sabor que también puedes disfrutar en tu plato.
Winner, te traemos una selección de flores comestibles para que le des un toque de color a tu cocina esta primavera, el mismo colorido que presenta la edición especial Win AECC, de un rosa fuerte, y que marida como anillo al dedo con las siguientes propuestas.
Capuchinas
Rojas, amarillas, anaranjadas… sus pétalos tienen un sabor neutro, pero la base de la flor concentra aromas amargos y picantes. Si no te agrada del todo su sabor, también las puedes utilizar enteras de decoración y mezclar sus pétalos con la comida, por ejemplo con una ensalada verde.
Begonias
Pese a tener una hermosa y amplia gama de colores, saben a limón. Si haces una macedonia de frutas, le darán el matiz fresquito del cítrico, además de un toque visual especial. Si le añades helado de naranja, obtendrás un postre sabroso y saludable.
Azahar
¡Winner! Estarás de acuerdo con nosotros en que no hay una señal más clara de que ha regresado la primavera que el olor a azahar en las calles. Si vives en lugares como Andalucía, seguro que tienes asociada esta flor a la llegada del buen tiempo.
Puede que te sorprenda, pero el azahar tiene un sabor muy dulce, por lo que suele utilizarse para postres. Te recomendamos adornar con ellas un batido helado de frutos rojos. ¡Espectacular!
Jazmín
Muy utilizada en Oriente, por ejemplo en tés o dulces, el aroma del jazmín le viene bien a casi todo.
Te traemos una receta que une las dos cosas: galletas con té de jazmín. Solo necesitas aceite de oliva, huevos, azúcar moreno, harina y, por supuesto, el té.
Caléndula
Puedes utilizarla entera o solo sus pétalos. Aportará, además de su color naranja, un aroma muy agradable y un sabor que puede sustituir al azafrán.
Si quieres tomarla de una forma muy distinta ¡rebózala en harina! ¡Un verdadero manjar! El broche perfecto para este plato sería un buen vino sin alcohol, como nuestro Win Blanco Verdejo.
Violetas
Frescas, secas, cristalizadas, confitadas… estas flores se pueden tomar de mil maneras. Fueron una de las primeras en consumirse. Además de aportar a los platos una gran belleza visual, son fuente de vitaminas y antioxidantes.
Añádelas a una ensalada de pepino y lechuga, y tendrás un plato ¡muy refrescante!
Hay muchas flores comestibles, ¡pero también toxicas! Nuestro consejo es que te informes bien antes de incluirlas en tus comidas. Por ejemplo, puedes ir al vivero más próximo a tu domicilio y adquirir semillas de algunas de las flores que te traemos en esta recopilación. ¡Cultivarlas para comerlas también será una experiencia bonita!